Boris Johnson ha confirmado que, a partir del 2021 será necesaria la posesión de un contrato de trabajo de 30.000 euros anuales y la certificación de un alto nivel de inglés son algunas de las condiciones para poder emigrar al Reino Unido.
Asoman ya las consecuencias del Brexit, la salida del Reino Unido de la Unión Europea, se pretende así acabar con la "distorsión" creada por la libertad de movimientos y "recuperar" el control de las fronteras.
Este es el nuevo plan de inmigración del Gobierno Británico, fuertemente censurado por la patronal y los sindicatos ya que, de este modo, peligrarán sectores como la sanidad, la agricultura y la hostelería. Hágase mención de la múltiple captación de mano de obra para estos sectores de otros países europeos hasta la fecha.
A partir del 2021, se requerirá la posesión de un contrato laboral por importe superior o igual a 25.600 libras, 20.470 en casos especiales, más la necesidad de contribuir la cantidad de 500 libras anuales al sistema de Sistema Nacional de Salud (NHS) para tener acceso a la sanidad pública.
Comenten a continuación señores... ¿Quién se beneficiará o se perjudicará de estas nuevas condiciones de inmigración? ¿Será una oportunidad para la solicitud de esta mano de obra por parte de otros países? ¿O, llevará esta nueva situación al país británico a un desequilibro en los mencionados sectores? Hagan sus apuestas señores...
Laura Martínez Isern